05/09/2025

Dos voluntarias de Zaragoza participan en un encuentro de Cáritas Española para jóvenes

La iniciativa "Impulso 360º" se celebró el pasado agosto en Madrid y reunión a más de 30 jóvenes de todo el territorio confederal

María Val y Lucia Delgado, voluntarias de nuestra diocesana, participaron el pasado agosto en la iniciativa <Impulso 360º>  de Cáritas Española. Una propuesta para jóvenes, mayores de 18 años, que realizan su voluntariado en las Cáritas de toda nuestra confederación.
María y Lucía disfrutaron junto a más de 30 jóvenes de 3 días de formación, talleres, testimonios y actividades varias en Cercedilla (Madrid). Esta iniciativa confederal nace con la expectativa de que la participación de los jóvenes se concrete a posteriori en algún proyecto transformador en sus respectivas Cáritas diocesanas. 
Y qué mejor que ellas mismas nos cuenten su experiencia, compartimos su testimonio en primera persona:

 

Lucía y María durante el encuentro en Cercedilla (Madrid)

«Durante estos días en Madrid hemos recibido mucho más de lo que hemos podido aportar. Hemos aprendido tanto y vivido experiencias que no pensábamos que iban a llenarnos tanto.

Llegamos el lunes por la tarde a Cercedilla y rápidamente conectamos con el grupo mediante una serie de dinámicas grupales.

El martes empezamos el trabajo duro, durante toda la mañana realizamos unos talleres en los que aprendimos a comunicarnos con los demás de forma adecuada, además de a saber escuchar. También descubrimos cuáles eran nuestras fortalezas como futuros líderes y cómo podíamos potenciarlas para aplicarlas en nuestros grupos. Por la tarde pudimos conocer los trabajos y proyectos que hacen el resto de las diócesis, pudimos empaparnos de su conocimiento y de muchas ideas nuevas que nos gustaría llevar a cabo.

El miércoles realizamos una excursión en grupo, fue un momento de conexión tanto grupal como con la naturaleza. Por la tarde nos sorprendieron con una actividad musical de cohesión grupal, de la que pudimos aprender que incluso dentro del caos se puede liderar. Por último, esa noche vimos un documental que ha realizado la Cáritas Diocesana de Girona sobre las personas sin hogar, fue un momento de reflexión en el que todos nos emocionamos por el sufrimiento de estas personas y por el gran trabajo realizado por la diocesana.

El jueves seguimos formándonos, aprendimos cuáles eran las cualidades más importantes para formar un grupo dentro de nuestra Cáritas y el proceso que necesita un proyecto para salir adelante. Por la tarde participamos en una gymkana en la que pudimos poner en práctica lo que habíamos aprendido, mediante diferentes retos y preguntas intentábamos aplicar todo el nuevo conocimiento a nuestros proyectos y diocesanas. Por la noche tuvimos una velada en la que cada uno trajo comida típica de su ciudad, fue un momento muy bonito en el que pudimos disfrutar y reír juntos.

El viernes fueron las despedidas, con mucha pena y emoción nos despedimos, pero sobre todo con nuevas amistades además de con un montón de aprendizajes y vivencias nuevas.

Desde una perspectiva más experiencial, poder ir a este encuentro ha sido todo un privilegio.

Hemos vivido una semana de convivencia, espiritualidad y formación donde hemos podido aprender a liderar (que no dirigir) y liderarnos, cohesionar equipos, tejer redes comunitarias y aprender habilidades de comunicación tan importantes e infravaloradas como son la escucha y sus tres niveles entre otras.

La casa de convivencias de Cáritas en Cercedilla ha sido un espacio único de desconexión del mundanal ruido y de todas las inquietudes que traíamos de casa para poder centrarnos en nosotros mismos, en Cáritas y nuestra labor en ella. Conocer los proyectos de Voluntariado Joven que otras diocesanas llevan a cabo nos ha motivado a querer realizar lo mismo en la nuestra porque como nos dijeron, los jóvenes voluntarios somos los Superhéroes del Mundo Moderno.

Todo lo que hemos vivido en Impulso 360º nos resulta imposible dejarlo en Cercedilla, volvemos realmente motivadas para “impulsar” a los voluntarios jóvenes de Cáritas Diocesana de Zaragoza y crear proyectos con nuestro “para qué” como foco: hacer un mundo mejor».