Jubileo de la Esperanza 2025: La Iglesia refuerza su compromiso contra la trata de personas

El Centro Fogaral, apoyado por el Excmo. Cabildo Metropolitano de Zaragoza, impulsa la sensibilización y el acompañamiento integral a mujeres en contextos de prostitución y trata.

Respondiendo a la llamada del papa Francisco, en este año 2025 celebramos el Jubileo de la Esperanza. La vivencia personal y comunitaria de este Jubileo lleva consigo un compromiso social que se concreta en un proyecto de sensibilización sobre la trata de seres humanos, la esclavitud del siglo XXI.

Este proyecto sitúa a las personas en el centro y, desde la sinodalidad, nos impulsa a construir juntos un mundo de mujeres y hombres libres, sin explotación ni esclavitud.

Agradecemos al Excmo. Cabildo Metropolitano de Zaragoza su implicación en visibilizar la labor de la Iglesia en este ámbito, así como el apoyo económico brindado al Centro Fogaral de Cáritas Diocesana de Zaragoza, que acoge y acompaña a mujeres en contextos de prostitución y/o víctimas de trata con fines de explotación sexual.

Fogaral ofrece un espacio seguro de escucha, libre de juicios, que ayuda a sanar heridas y restaurar la dignidad dañada. Al mismo tiempo, desarrolla acciones de prevención, sensibilización y denuncia frente a esta lacra social.

En 2024, el Centro acompañó a 426 mujeres: el 53% se encontraban en contextos de prostitución con alto grado de vulnerabilidad; en el 36% se identificaron indicios de explotación sexual; y en el 11% restante se detectaron indicios de trata con fines de explotación sexual o estos fueron confirmados oficialmente. El rostro de estas mujeres víctimas es, mayoritariamente, el de mujeres jóvenes -menores de 35 años- y de procedencia extranjera.

Las víctimas que han sufrido este drama y participan en los procesos de acompañamiento de Fogaral son, para la Iglesia, signos de esperanza. Gracias al apoyo promovido por el Excmo. Cabildo Metropolitano de Zaragoza, se refuerza significativamente la labor del proyecto y se ofrece un testimonio comprometido en este año que marca también el inicio del camino hacia la celebración del bimilenario de la venida de la Virgen (40 d. C. – 2040 d. C.), un gran jubileo mariano en el que la figura de la mujer constituye un eje articulador.

Este acontecimiento único en la historia de la fe cristiana busca, entre otros objetivos, promover en el ámbito social y caritativo acciones inspiradas en la ternura, la solidaridad y la maternidad de María, alentando una cultura del cuidado.

Cuidado que, además, es un pilar fundamental en el Centro Fogaral, cuyo nombre en aragonés significa “calor de hogar”.