Análisis y reflexión12/02/2024

La Cuaresma, tiempo de reformas

La Cuaresma como un tiempo de reflexión y reconstrucción de uno mismo

Tenemos una nueva oportunidad para volver a empezar. Llega la Cuaresma, momento para la conversión a Dios y la reflexión. Un momento para volver al origen de nuestra fe: Jesús de Nazaret.

La Cuaresma es un tiempo de “reformas”; no de reformar casas, sino de reformar nuestra vida, de construir en nosotros mismo nuevas estancias. Cada estancia necesita una reforma diferente. En la Cuaresma hay que abordar el cambio en cada una de ellas: nuestros miedos, nuestra manera de actuar, nuestros compromisos, nuestra vida de fe y de oración… tenemos por delante cinco semanas para ponernos manos a la obra. 

Siempre se ha entendido como un tiempo de penitencia y conversión… ¡y es verdad! Reformar la vida implica mucho de penitencia, de dificultades, de sacrificios. Es poner tu vida en sintonía con Dios. Podríamos decir que la Cuaresma es una etapa para “esmerarse” en aquello que Dios ha soñado: un proyecto de vida que pasa por la entrega de la misma, a pesar de lo que eso supone de renuncia a otras cosas.

Reforma tu Vida, para hacerla más habitable, más cálida, que sea capaz de poder estrechar el vínculo entre Cristo y tú.

Aplícate, poco a poco, a la luz del Evangelio, sacando lo mejor de ti para prepararte al “aquí estoy” de Dios en la entrega en la Cruz.